Un homenaje a Lise Meitner
Autor: Mónica María Gómez Hermida
- febrero 21, 2025
El 11 de febrero se celebra el Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia, una fecha establecida el 22 de diciembre de 2015 por la Asamblea General de las Naciones Unidas, con el objetivo de promover mejores prácticas y estrategias que garanticen el acceso y la participación plenos y equitativos en la ciencia para mujeres y niñas.
Contar con referentes femeninos es una estrategia que puede ser útil para motivar a las niñas y jóvenes a escoger carreras en áreas científicas y tecnológicas. Sin embargo, los nombres de mujeres científicas suelen ser escasos en la memoria colectiva. Marie Curie es, quizá, la figura más recordada, pero no fue la única. Lise Meitner, una física con un legado igualmente impresionante, merece ser recordada y celebrada.
Nacida en Viena en 1878, Lise Meitner decidió desde joven dedicarse a la ciencia, enfrentando las barreras educativas de su época, cuando la formación de las mujeres finalizaba abruptamente a los 14 años. Con el apoyo de su padre y tras la apertura del gobierno austriaco en 1901, Meitner se convirtió en una de las pocas mujeres en ingresar a la universidad, obteniendo un doctorado en física en la Universidad de Viena. Más tarde, hizo historia al ser la primera mujer en ocupar un puesto de profesora titular de física en Alemania.
Meitner, de origen judío, sufrió el exilio durante la Segunda Guerra Mundial. Desde la distancia, colaboró con Otto Hahn en el estudio de elementos radiactivos. Fue ella quien acuñó el término «fisión nuclear» y explicó sus principios físicos, además de calcular la energía liberada en el proceso. Este avance sentó las bases tanto para los reactores nucleares como para la creación de armas nucleares, aunque Meitner se negó rotundamente a participar en investigaciones relacionadas con estas últimas.
Aunque sus contribuciones al entendimiento de la física atómica dieron nacimiento a toda una nueva era, Lise Meitner nunca recibió un Premio Nobel, pese a haber sido nominada 49 veces: 19 en química y 30 en física. Su colega Otto Hahn, en cambio, fue galardonado con el Nobel en 1944 por el trabajo realizado en conjunto con Meitner. A pesar de esto, su nombre quedó inmortalizado en 1997, cuando se designó un elemento químico en su honor: el meitnerio.
Recordar a Lise Meitner y a tantas otras mujeres que han transformado la ciencia es fundamental para construir un futuro donde el género no sea un obstáculo para alcanzar sueños científicos. Que su historia inspire a las niñas y mujeres de hoy a conquistar nuevos horizontes en la ciencia.
*Docente Universidad Católica de Pereira