Inteligencia artificial: una herramienta útil, pero de cuidado
Autor: Julia Castaño González
- octubre 20, 2023
La inteligencia artificial -IA- es una tecnología que combina la ciencia y la informática para, a través de algoritmos, resolver problemas y tomar decisiones imitando la mente humana. La IA ya dejó de ser algo misterioso o de estar en etapa inicial y, hoy por hoy, está revolucionando diversos sectores, entre ellos el de la educación en todos sus niveles.
En el ámbito universitario, la IA se viene utilizando para facilitar algunos procesos docentes frente a la enseñanza y estudiantiles frente al aprendizaje, sin embargo, aunque se reconoce que la IA tiene muchos beneficios, también presenta desventajas, e incluso, riesgos y peligros que deben ser considerados.
En cuanto a los beneficios, puede automatizar tareas repetitivas y tediosas, liberando a los estudiantes para que se centren en tareas más estratégicas y creativas. Además, la IA puede trabajar con datos sensibles sin riesgo de que se haga un mal uso de ellos. Por ejemplo, puede ayudar a los estudiantes a analizar grandes cantidades de información y a tomar decisiones informadas de manera más rápida y precisa. La IA también puede personalizar el aprendizaje para cada estudiante, lo que permite a los estudiantes aprender a su propio ritmo y en su propio
estilo.
Sin embargo, encuentro grandes peligros, entre ellos, que puede desplazar empleos tradicionales y llevar a una disminución en la demanda de trabajadores humanos, siendo seria ya la situación de empleo. Por otro lado, la implementación y mantenimiento de IA puede ser costosa, lo que limitaría su uso en algunas instituciones educativas.
En el ámbito formativo, puede ser utilizada para hacer trampa en las tareas escolares o plagiar trabajos académicos. Si los estudiantes tienen acceso a herramientas de IA que les permiten hacer sus tareas automáticamente, se podría socavar el proceso de aprendizaje y ocasionar que los estudiantes dependan demasiado de la tecnología; bajo este panorama, preocupa la calidad de los profesionales del futuro, sobre todo en áreas tan sensibles como la salud, la ingeniería o la mecánica, por mencionar algunas.
Uno de los muchos problemas es que, hoy por hoy, los jóvenes no son tan monitoreados desde los hogares como quisiéramos los maestros. Lo ideal es que los padres se aseguren de que sus hijos entiendan la importancia de la integridad académica y les enseñen a utilizar la tecnología y, específicamente la IA, como una herramienta para mejorar su aprendizaje, no como un sustituto de este. Entre muchas cosas, debemos retomar la conciencia de que la educación es un proceso que comienza en casa y continúa en la escuela y que los padres son los primeros modelos por seguir…
*Docente Universidad Católica de Pereira.