EL OTRO ES UN DON
Autor: Padre Diego Arcila Vélez
- marzo 2, 2017
Esta semana, con la imposición de la Santa Ceniza comenzaba para los cristianos católicos el tiempo de Cuaresma, que significa cuarenta días de oración, penitencia y solidaridad, para prepararnos a la Semana Mayor en donde conmemoramos la pasión, muerte y resurrección de nuestro Señor Jesucristo. Es un tiempo altamente espiritual y
digno de ser vivido en el más profundo recogimiento.
Durante estos días el Papa Francisco suele enviar un mensaje a todos los cristianos católicos y a todo el mundo para que por medio de él nos acerquemos a esta dimensión del alma tan provechosa para nuestra vida personal y social. Este año el Papa a titulado este mensaje “La palabra es un don; el otro es un don”; el cual resumo a continuación.
El Papa comienza citando el Evangelio de San Lucas en el capítulo 16, 19-31, en la llamada parábola del hombre rico y el pobre Lázaro, en el que se describe como este último espera en la puerta del rico “tan siquiera un poco de pan”, cosa que no se produce y después de que los dos mueren, se enfrentan uno –el rico- con el tormento del infierno y el otro –el pobre- con la dicha del cielo. Enseñanza que en Jesús quiere hacernos entender la gran oportunidad que tenemos de servir a los demás, especialmente a los que más sufren y están más desprotegidos.
Decir que el otro es un don, es descubrir en todos los que nos rodean la gran oportunidad vde compartir y de servir, amándolos y promoviéndolos en todos los espacios de la existencia, diríamos hoy, sin muros que dividan, sin extranjeros maltratados y aplicándoles la pena de muerte, sin tantos pobres y tan pocos ricos, sin guerras
producidas por la corrupción de los gobiernos, sin niños asesinados en el vientre y expuestos a vejámenes como la explotación sexual y comercial, sin exclusiones por credos, colores o condiciones económicas. El otro es sagrado y merece todo mi cariño y comprensión, agrega el Papa.
“La Cuaresma es un tiempo propicio para intensificar la vida del espíritu a través de los medios santos que la Iglesia nos ofrece: el ayuno, la oración y la limosna” y continua diciendo “al otro debemos abrirle la puerta de nuestro corazón, porque cada uno es un regalo, sea un vecino nuestro o un desconocido”. Es la llamada universal al respeto y la promoción integral del otro. “El otro es un templo y en él habita Dios”, irrespetarlo es “irrespetar a Dios Padre”. Cuando amo, creo y doy lo mejor de mí por el otro, quitándome el pan de mi boca para dárselo a quien lo necesita, eso es Cuaresma.
*Rector Universidad Católica de Pereira