LA TECNOLOGÍA EN LA AGRICULTURA COMO ALTERNATIVAPARA LA POSTPANDEMIA
Autor: Juan Carlos Blandón Andradre
- mayo 14, 2021
El virus COVID-19 hará que la humanidad recuerde el año 2020 y 2021 por el alto número de personas fallecidas o enfermas y por la quiebra financiera de muchas personas, así como de microeconomías a nivel mundial. Como una luz de esperanza, la ciencia en tiempo record desarrolló una vacuna que parece ser la solución para resurgir.
La agricultura es un sector de vital importancia para las personas porque brinda los insumos necesarios para la alta demanda alimenticia en un mundo densamente poblado, pero dicha labor en muchas ocasiones no es valorada y no se reconoce a los verdaderos responsables de que haya comida en el mundo, es decir, los campesinos, los cuales muchas veces son hasta discriminados por su labor.
En Colombia, según el DANE en el año 2019 la población que vive en el campo llega aproximadamente a 11 millones que equivale a 3.7 millones de familias. Según algunas informaciones, aunque los campesinos podían seguir trabajando durante el confinamiento, hubo efectos negativos. Por ejemplo, existían cosechas de muchos
productos y como los campesinos no cuentan con medios tecnológicos ni de transporte, no podían llevar sus productos a los centros de acopio.
A esto se suma que, por el temor a un contagio en los mencionados centros, los campesinos debían vender sus productos a intermediarios, quienes realmente se los pagaban a un precio que no les permitía obtener algún tipo de ganancia, a pesar de su esfuerzo y la importancia de su cosecha.
A través de los años la utilización de la tecnología en el campo ha crecido, desde el tractor, las máquinas especializadas, hasta lo que se puede ver en la actualidad con aporte importantes desde la ingeniería, telecomunicaciones y biotecnología. A este tipo de tecnología se conoce como agrotecnología y entre los aportes que se realizan se encuentra el software de distintos tipos, tecnología GPS, drones, geolocalización, tecnología 5G, modificación genética de productos, entre muchas más.
La agrotecnología se convierte entonces en una buena alternativa de reactivación postpandemia, esto se traduce en que los gobiernos nacionales, regionales y locales podrían realizar inversiones en proyectos tecnológicos apuntando hacia este sector. Se pueden establecer alianzas estratégicas entre el Estado y la academia con sus programas relacionados con tecnología, donde se puedan construir procesos a lo largo del tiempo, que luego podrían tener buenos resultados. Así se podría contribuir con el mejoramiento de la calidad de vida de las familias
campesinas y convertir el campo nuevamente en un eje para la economía sin depender tanto del petróleo y el turismo.
*Docente Universidad Católica de Pereira