¡FAMILIA, ESTÁS EN EL CORAZÓN DE DIOS!
Autor: Universidad Católica de Pereira
- octubre 8, 2015
Se ha dado comienzo esta semana en el Vaticano por mandato del Papa Francisco, al Sínodo de la Familia, el cual convoca a muchos obispos del mundo para analizar y profundizar sobre uno de los aspectos más importantes y definitivos para la vida de la fe y de la Iglesia.
El Sínodo no es una reunión política o estratégica para tratar temas de manera fría y calculadora, ni tampoco debe ser equiparado a un “congreso” donde se establecen leyes, se derogan o se imponen. Todo Sínodo y en especial éste, quiere desde la fe y la confesionalidad católica, decirle al mundo que la institución más natural, grande y que no admite cambios sustanciales es la familia.
El Papa Francisco, en su tarea de amar y proteger lo que Nuestro Señor Jesucristo nos enseñó, quiere hacerle un llamado a la humanidad para valorar, promover y defender todo aquello que en la estructura más nuclear de la sociedad se hace imperativo pensar hoy, pues la familia pasa “en estos tiempos por grandes crisis y grandes amenazas a las cuales nos urge atender”, indicó en la apertura al Sínodo.
La familia que camina en la vía del Señor es fundamental en el testimonio del amor de Dios y merece toda la dedicación por parte de la Iglesia. El Sínodo está llamado a interpretar, para hoy, este celo y este cuidado por parte de los católicos.
La familia está en el corazón de Dios. “Él los ha creado hombre y mujer” (Gen 1,27) y lo hizo para que se amarán y “llenarán la tierra” (Gen 1,28), su fin primordial son los hijos, su cuidado y realización. De ahí que la institución más natural y más divina es la que cumple con este modelo. Amarse como pareja, es la vocación más altruista. Cuidarse y respetarse en la fidelidad y el amor mutuo, es el llamado central que este Sínodo quiere ofrecer.
El lema del Sínodo alude a “los desafíos, la vocación y la misión de la familia”, desafíos que se hacen cada vez más perentorios, pues los Estados con sus gobernantes, piensan cada vez menos en ella y no la incluyen de manera central en sus planes de gobierno, esto sin hablar de los muchos problemas por los cuales pasa, problemas que obedece a los modelos sociales, culturales y económicos que muchas veces la deshumanizan.
La vocación de la familia en su integridad es faro y luz para un mundo cada vez más técnico y light, es en ella donde se promueve una verdadera educación y apropiación de la vida. ¡Familia, estás en el corazón de Dios y Él te protegerá!
