DIÓCESIS EN MISIÓN PLAN PASTORAL 2016-2025
Autor: Universidad Católica de Pereira
- octubre 25, 2016
Nuestra Diócesis de Pereira presentó en una ceremonia solemne y muy concurrida a todos los fieles católicos de esta región el plan de pastoral a 10 años, liderado por nuestros obispos titular y auxiliar.
En dicha ceremonia escuché de mi pastor Monseñor Rigoberto Corredor Bermúdez una de las homilías más bellas en cuanto construcción doctrinal, magisterial, pastoral, antropológica y social que describía detalladamente lo que se pretende con dicho documento. Ha dicha homilía quiero hacer referencia en sus puntos más esenciales.
Lo primero es la referencia que Monseñor hace a la Madre Santa Laura Montoya a quien dedica en su día la liturgia, describe su celo por las almas indígenas, su vocación de “joven” maestra y las muchas dificultades que tuvo en su extensión del reino de Dios, llegando – decía el Obispo- a tierras risaraldenses donde ejerció con sus hermanas la obra misionera.
Este plan responde a eso, a la misión y a reavivar el espíritu profético y evangelizador propio de las comunidades evangelizadas y evangelizadoras que cada día toman más conciencia de su papel de bautizados en nuestras parroquias.
Seguidamente Monseñor saluda a un grupo de sus sacerdotes que cumplen bodas de oro y de plata como servidores del Señor, a ellos y a los asistentes los invita y anima a “no perder el amor y a renovarlo cada mañana y cada tarde en el espíritu de la oración y servicio por todos los que se nos han confiado, especialmente los más pobres y necesitados”.
El plan invita a orar, fomentar las vocaciones al sacerdocio y a la vida ministerial, abriendo el abanico a todos para que encuentren en la iglesia su tarea y su misión. Sin sacerdotes y laicos comprometidos no es posible esta tarea.
Finalmente y entre palabras muy profundas, el señor Obispo deja ver su sensibilidad por lo social, antropológico y cultural, lanza grandes interrogantes, desafíos y toma posturas muy serias de cómo este plan pastoral puede trasformar las estructuras de miseria y pobreza espiritual y material que está sufriendo el mundo y nuestra querida Pereira.
“Es indiscutible que en el mundo hay confusión por la inhumanidad que ha contaminado a muchos ámbitos de la sociedad. Hoy los agujeros oscuros de la globalización, están dejando grandes multitudes al margen de los mínimos vitales”, reiteró nuestro Obispo.
Gracias Monseñor, esperamos estar a la altura de este plan pastoral con amor y mucha entrega.